BETHLEHEM, Pensilvania. — Predecir la política puede ser arriesgado. Solo pregúntele a cualquiera que asumió que Joe Biden aparecería en la boleta de 2024.
Sin embargo, a medida que se acerca 2026, algunos temas políticos parecen destinados a dominar los próximos meses.
Esto es lo que los votantes pueden esperar en el nuevo año.
Elecciones de medio mandato en el Congreso
Los márgenes en Washington son extremadamente estrechos, mientras los republicanos intentan proteger su escaso control de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. El control de la cámara podría depender de contiendas en el Valle de Lehigh, incluida la del Séptimo Distrito del Congreso de Pensilvania.
El distrito es uno de varios escaños competitivos a nivel nacional. Se espera que ambos partidos principales inviertan grandes recursos en publicidad y contacto con los votantes para apoyar a sus candidatos.
Se espera que el representante federal Ryan Mackenzie, republicano y actual titular del cargo, busque un segundo mandato. Mackenzie es un firme partidario del presidente Donald Trump, pero en ocasiones ha tenido desacuerdos con el liderazgo de la Cámara sobre los esfuerzos para preservar los créditos fiscales de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (Affordable Care Act).
Cinco demócratas lo desafían: el dirigente sindical de bomberos Bob Brooks; el exfiscal federal Ryan Crosswell; el ejecutivo del condado de Northampton, Lamont McClure; la ingeniera en energía Carol Obando-Derstine; y el contralor del condado de Lehigh, Mark Pinsley.
Tras varios ciclos electorales con primarias de bajo gasto, la primaria demócrata de 2026 podría ser competitiva. Crosswell ha comenzado a recaudar fondos a través de una red nacional de donantes. Brooks podría beneficiarse de donantes vinculados a uno de sus apoyos más destacados, el gobernador Josh Shapiro.
La contienda por la gobernación de Pensilvania
Aunque las elecciones al Congreso atraerán gran parte de la atención nacional, los votantes de 36 estados elegirán gobernador en 2026, incluido Pensilvania. Si bien aún podrían surgir más candidatos, ambos partidos principales parecen haber definido a sus principales aspirantes.
El gobernador Josh Shapiro, demócrata y actual titular del cargo, enfrenta poca oposición para obtener la nominación de su partido. Una encuesta del Franklin & Marshall College, realizada en octubre, encontró que el 51% de los votantes registrados en Pensilvania considera queShapiro está haciendo un trabajo excelente, mientras que el 40% califica su gestión como regular o deficiente. Estas cifras son sólidas en un contexto en el que muchos funcionarios electos registran bajos niveles de aprobación, especialmente ante la preocupación por la economía. Resultados similares han aparecido en otras encuestas a lo largo de su mandato.
Se espera que Shapiro enfrente a la republicana Stacy Garrity, quien fue elegida tesorera estatal en 2020. Varios posibles rivales republicanos se han retirado y han respaldado a Garrity, entre ellos el representante federal Dan Meuser, de Pensilvania, y el representante estatal Scott Martin, del condado de Lancaster. La principal excepción es el senador estatal Doug Mastriano, del condado de Adams, a quien Shapiro derrotó ampliamente en 2022.
Garrity delineó lo que podría ser su mensaje de campaña durante una reciente visita del vicepresidente JD Vance al condado de Lehigh. Allí instó a los votantes a reemplazar a Shapiro por un gobernador que trabaje con la administración Trump en lugar de oponerse a ella. Shapiro ha presentado demandas contra la administración Trump después de que funcionarios federales recortaran fondos para proyectos de vehículos eléctricos, beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) y programas de seguridad pública. La administración Trump también ha demandado a Pensilvania para obtener acceso a parte de los datos de registro de votantes del estado.
La carrera por la gobernación podría tener implicaciones nacionales. Muchos demócratas ven a Shapiro como un posible candidato presidencial en el futuro. Aunque ha minimizado esas aspiraciones, sus viajes a otros estados y la próxima publicación de sus memorias políticas han alimentado las especulaciones. Para los republicanos, derrotar a Shapiro, o al menos obligarlo a una contienda reñida, sería una forma de debilitar su perfil nacional de cara al ciclo electoral de 2028.
Asamblea General
El próximo gobernador probablemente esperará contar con mayorías legislativas más amplias. Los republicanos actualmente tienen una mayoría de un solo escaño en la Cámara de Representantes de Pensilvania, pero se espera que los demócratas recuperen una mayoría de un escaño tras las elecciones especiales programadas para febrero.
Los republicanos mantienen una estrecha mayoría en el Senado estatal. El gobierno dividido ha contribuido al estancamiento legislativo en Harrisburg, incluido un presupuesto estatal que fue aprobado con cuatro meses de retraso en 2025.
Lehigh Valley sigue siendo una de las regiones políticas más competitivas de Pensilvania. El Distrito 137 de la Cámara estatal, que abarca suburbios del condado de Northampton, está casi dividido por igual entre demócratas y republicanos registrados. Unos 10.000 votantes registrados como independientes o en terceros partidos probablemente serán decisivos.
El comisionado del condado de Northampton Jeff Warren, un demócrata de Bethlehem Township, ya lanzó una campaña contra el representante estatal Joe Emrick, el republicano que ocupa actualmente el escaño.
En el otro extremo del espectro político se encuentra el Distrito 22 de la Cámara estatal de Pensilvania. Los demócratas tienen una clara ventaja en el registro de votantes, pero el partido debe elegir un candidato para reemplazar a Josh Siegel en una elección especial. Se espera que menos de dos docenas de miembros demócratas locales seleccionen a la persona que representará a más de 62.000 residentes de Allentown y Salisbury Township.
Los ganadores de 2025 enfrentan el reto de gobernar
Los demócratas tuvieron un buen desempeño en las elecciones de 2025. Ampliaron sus mayorías en las juntas de comisionados de los condados de Lehigh y Northampton y ganaron ambos cargos de ejecutivo del condado por amplios márgenes. Una vez que asuman sus funciones, deberán cumplir con las promesas de campaña.
El ejecutivo electo del condado de Lehigh, Siegel, presentó varias propuestas ambiciosas durante la campaña. Entre ellas figuraban la creación de un impuesto a las ventas para reducir los impuestos a la propiedad y la exploración de departamentos policiales y de bomberos de todo el condado. Siegel ha dicho que su principal prioridad será la construcción de viviendas subsidiadas. Su plan requiere que los gobiernos locales colaboren para reunir 100 millones de dólares destinados a la construcción de miles de apartamentos en toda la región. El alcalde de Allentown, Matt Tuerk, ha expresado interés, pero sería necesaria la participación de más municipios.
La ejecutiva electa del condado de Northampton, Tara Zrinski, centró su campaña en mejorar los servicios en Gracedale y en preservar los servicios del condado mientras el gobierno federal reduce el gasto y las subvenciones transferidas.
